... En Tiempos de Cultura ...

miércoles, 19 de noviembre de 2008

El llamado Viernes Cultural

Ivancho / Peña

En el lenguaje universitario, si se puede llamar lenguaje, el viernes cultural se convierte en aquel día que inicia el fin de semana, el día que le permite despojarse de las obligaciones universitarias y laborales, incitándolo a ese tan preciado trofeo que se llama libertad. Se dice, se acabaron las clases, por esta semana, llegó el viernes, y la cultura universitaria ha transformado ese viernes en fiesta, en desahogo, en unas cuantas cervezas sociales (nunca se habla de una cerveza). Es ese el gran problema, las palabras Viernes Cultural perdieron ese valor agregado que se aprendió del colegio.
Hoy por hoy, el sistema masivo de transporte de la capital, Trasmilenio, lucha porque esas dos palabras se unan nuevamente para lo que se necesitan, crear cultura. Por eso desde los últimos meses y lógicamente todos los viernes Trasmilenio se dedica a abrir su Viernes Cultural. Cabe destacar todos los eventos que el sistema de transporte ofrece a los bogotanos, pero tal vez uno de ellos sale del anonimato y se impone en la cultura bogotana.
Transmilenio y la Universidad Jorge Tadeo Lozano se encargaron, a finales de octubre de llevar a los bogotanos, las obras y piezas de la Danza Contemporánea a la calle, precisamente en algunos escenarios simbólicos de la ciudad.
La invitación fue para muchas universidades que se agruparon en distintos puntos para dar inicio y fin al XII Festival Universitario de Danza Conteporánea. Entre ellos cabe destacar la participación en las estacion de Las Aguas, de grupos como la Universidad del Norte, con “Castillo de Arena”; la Universidad Nacional de Colombia, con la obra “Tin – Marin”; “Metrópoli Frenética” de los estudiantes de la Universidad Distrital.
El Festival culminó el pasado mes de octubre y tuvo gran convocatoria, a pesar de los efectos climáticos por los que pasa hoy la ciudad y gran parte del país. Cabe destacar que Bogotá, pasó de ser la Capital Mundial del Libro a una Capital Versátil, diferente y netamente cultural, no tiene diversidad de climas pero si de cultura, y no precisamente la universitaria, sino la cultura popular, ciudadana, esa que se baña de textos literarios y acude a ver las piezas de danza en una estación de transporte masivo, desmitificando que es de élite y apta para pocos.

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¿Quién dijo que el Ballet es aburrido?

Un aparte de la película Camino a la Fama (2000) dirigida por Nicholas Hytner.